sábado, 15 de octubre de 2016

DECORANDO EL DEPOSITO DE LOCOMOTORAS

Después de armar tantas estructuras que soporten la maqueta, instalar vías, cablear, probar e ir agregando cualidades, hay un momento donde se debe cambiar la mecánica de trabajo, ya sea por ansiedad o por aburrimiento de lo tediosa y repetitivas que son algunas tareas.
Es así que hice un alto en la huella y decidí que era hora ya no solo balastar sino de empezar a darle color y escenario a alguna parte importante de la maqueta, y esto recayó precisamente en el depósito de locomotoras, y vaya si había trabajo allí.



Para empezar, todos y sin excepción somos unos despelotados totales a la hora de estar trabajando sobre el tendido cuando no hay escenario que contenga el lugar objetivo, por lo que fue necesario despejar de varios elementos para dejar listo el lugar, incluyendo la limpieza.

Una vez hecho esto apliqué a toda la zona una mano de acrílico color sombra natural, el cual haría de fondo de los elementos que contuvieran la escena.
Terminado este trabajo, inicié el preparado y colocación del paredón de ladrillos que oficia de contención de la parte superior de la ciudad que discurre a lo largo del depósito.
Fue necesario trabajar con cuidado ya que este papel de muy buena calidad se rompe con facilidad cuando se humedece. 
DATO: no peguen este papel sobre el fondo soporte con el pegamento en aerosol Super 77 de 3M, en 30 días se empieza a despegar y es receta para el desastre, y más si lo van a humedecer para usar una técnica de weathering.
Luego hice la plataforma de asistencia para combustibles, agua y arena a las 3 vías que entran al edificio de alistamiento. Esta fue hecha con un compuesto fraguable rápido llamado en la Argentina POXIMIX para exteriores, que es parecido a un yeso pero con características particulares del fabricante.
Terminada la plataforma aludida, inicié el balastado completo de partes de la zona con el producto de la firma Woodland Scenics código B1379 de color marrón y granulometría media. 
El resto, y aquí vino el experimento de turno, opté por usar este POXIMIX, que primero lo apliqué espolvoreando las zonas donde lo quería aplicar. 








Acto seguido, y con un pincel de 3 centímetros de ancho y cerda medio dura, fui limpiando las vías hasta dejar este material todavía en estado de polvo a nivel de durmientes. Fue interesante encontrar una forma distinta y mucho mejor de aplicar material entre durmientes.






Para poder fraguar el material en su sitio apelé a un rociador en spray aplicando con cuidado y esperando que la humedad fuera penetrando hasta que se formara algún pequeño charco indicando la saturación de la zona.
Pocas cosas me resultan con efectos que me causan una grata sorpresa a cada paso que doy, y esta fue una de ellas.





Cuando se estaba fraguando, y antes que se secara sobre los durmientes, con una esponja seca o un pequeño pañuelo tipo tissue, los pasé sobre los durmientes, entre los rieles y fuera de ellos, logrando que los mismos quedaran limpios de este yeso y dejando un aspecto inmejorable de la escena, lista para comenzar a aplicar los colores que harían del sitio una verdadera escena cuasi real.



También apliqué el esponjado lo apliqué en algunos lugares donde se amontonaba muy desparejo el material y quedó de película. Usé también bastante material fraguado viejo, bien picado para simular algún que otro cascote o protuberancia para cambiar la perspectiva de la escena... nada se pierde en escenografía casi todo sirve.
Las tres imágenes a continuación muestran el estado que quedó el material, recién fraguado sin colores, y ya tonalizado con distintos colores tierra para dar el efecto buscado.







En cuanto al toque de efectos de aceite, grasa y combustible disperso en algunos espacios muy específicos, usé esmaltes nacionales Sicko que me dieron una agradable sorpresa al saber que no tengo que buscar en el exterior lo que aquí se puede conseguir y de buena calidad.


En la imagen que se muestra a continuación ya se ha tonalizado todo el yeso y la pared del fondo de la trinchera está lista para recibir los refuerzos que imitarán columnas y por supuesto el ensuciado correspondiente.


En la siguiente imagen se puede apreciar la salida del edificio de alistamiento con una capa de balasto entre el edificio y la plataforma de combustibles, arena y agua. Se puede apreciar también que la pared de la trinche ya tiene los listones de refuerzo que simulan las columnas embebidas, así como algo del ensuciado en su primera prueba. También se puede apreciar el pasto ya colocado y en algunos lugares "atacado" por la suciedad, típica de lugares como este.


En esta otra imagen se aprecian las vías que hacen de colectora de las entradas al depósito y su paralela, donde se puede dejar a órdenes algún equipo, así como también armar múltiples de hasta 3 locomotoras grandes.
Al fondo, la pared de la trinchera ya ha sido terminada, incluyendo algunas plantas trepadoras para su decoración, entre la vegetación de la escena. El ensuciado de la zona de cada desvío se sigue haciendo con los productos de Sicko y MIG Jimenes. El camino de balasto blanco es el que comunica el edificio de alistamiento con la oficina principal del depósito general de locomotoras.




Finalmente el depósito visto en toda su magnitud ya decorado y operativo, preparado con una capacidad para recibir 26 locomotoras en total, todo en DCC.
Al fondo el edificio del taller de Mecánica pesada y el edificio de las oficinas administrativas del depósito.


Otra imagen de la zona del fondo del edificio de alistamiento, donde las tres vías traseras permiten dejar locomotoras que seguramente deban ir a reparación


Otra vista de la zona de abastecimientos ya "ensuciada" con GAS OIL.


El edificio de Mecánica pesada y las oficinas administrativas generales del depósito.


Por último, la mesa giratoria, la llave que permite acceder al edificio de pesada, todavía cuando le faltaba algo de terminación.